Vivienda construida en planta baja, de estilo rústico, reúne todo lujo de detalles que le da el encanto típico gallego a una edificación con todas las comodidades.

Piedra, vigas de madera, suelos de madera y terrazo, materiales que dan empaque a la propiedad, haciéndola una propiedad única en la zona.

Su edificación en parcela elevada, favorece que a pesar de ser de una vivienda en planta baja, tenga unas fantásticas vistas al mar.

La propiedad se compone de parcela de 622 m2, con varias construcciones, la principal, la casa de unos 123 m2, distribuidos en cocina – comedor muy amplia, equipada con todos los electrodomésticos e incluye un trastero.

Salón en doble altura, con chimenea y acceso por escaleras a terraza soleada con excelentes vistas.

Dos dormitorios dobles con armario empotrado y baño completo a compartir, tercer dormitorio, el principal con amplia zona de armarios y baño en suite completo.

Dese de la cocina, salón y dormitorio principal se accede a la parcela y al porche de la vivienda.

La finca dispone de zona de trastero y almacenaje (zona de caldera), zona de barbacoa y cenador con doble uso, aparcamiento para dos vehículos o donde disfrutar de reuniones.

Parcela ajardinada en la parte delantera de la vivienda, con vegetación exuberante, y alicatada con terraza en la zona trasera.

Si lo que buscas es intimidad, tranquilidad y calidad de vida, no dudes en visitar esta propiedad, te va a enamorar.